miércoles, 18 de agosto de 2010

Te quiero tanto, que no sé si habrás notado que en el mundo apenas queda amor para nadie más...



Estoy aquí y te quiero. Siempre te he querido y siempre te querré. Cada segundo de los que estuve lejos estuve pensando en tí, viendo tu rostro en mi mente. Cuando te dije que no te quería... ésa fue la más negra de las blasfemias.

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